Al viajero le gusta visitar la Iglesia Parroquial del Mártir Señor San Blas de nuestro pueblo Salvatierra de los Barros, además de encontrar allí un remanso de paz y tranquilidad, se entretiene admirando las bellezas de su interior: bóvedas, retablos, ménsulas, etc.
En esta ocasión se ha detenido ante el retablo de Nuestro Señor Jesucristo Resucitado que acoge la imagen de más valor de nuestra Iglesia que no ha mucho fue restaurada y que ahora se muestra con toda su esplendidez y hermosura.
Este retablo se encuentra en la pared del lado del Evangelio y sobre sus antecedentes nos informa la Asociación Cultural “Amigos de Salvatierra”, al igual que da detalles al visitante de cada uno de los demás retablos que decoran la Iglesia a través de distintas informaciones escritas y colocadas en cada uno de ellos.
Según la información que nos ofrece este retablo fue labrado por Francisco Ruiz Amador y su cuñado Miguel Sánchez Taramas allá por el año 1722, este Ruiz Amador también trabajó en la imaginería del retablo mayor de la Catedral de Badajoz.
La parte superior de este retablo está decorada con una pintura en lienzo que representa a Jesús Resucitado ascendiendo a los Cielos, mientras le observan la Virgen María y sus Apósteles.
Este comentarista que no está ducho en los análisis de esta clase de monumentos cree que el conjunto es bello y armonioso y hoy lo muestra en este muro los presentes que vivimos en el pueblo, los que posiblemente pasamos por su lado sin apercibirnos de lo grandioso de la imagen del Resucitado y de su retablo y también para que lo recuerden especialmente nuestros paisanos ausentes.
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