“El Pensador”, todos los sabemos, es una escultura muy afamada, de la que es autor el escultor francés Auguste Rodín”, este escultor buscaba representar a Dante, frente a las puertas del Infierno; pero aquí, el viajero no pretende hacer historia ni dar lecciones a nadie, para él las quisiera, sino simplemente, situarnos en el contexto para explicar que, con ocasión de las correrías que hizo junto a su amigo Antonio Moriano, durante la pasada Semana Santa, recorriendo los magníficos parajes de Salvatierra de los Barros.

Mientras realizaban el camino, daba tiempo a comentar sobre mil y una cosas y en el transcurso de estos comentarios, Moriano, se refirió a que muy cerca del lugar por donde íbamos transitando, teníamos una estatua que le llamaban “El Pensador”, no hecha por ningún escultor como la de Rodín, sino labrada por la Naturaleza.

Se trata de una mole rocosa, que por sus características peculiares, nos recuerda a la figura de un hombre en actitud pensante, se encuentra a la izquierda de la Pista de Nogales y muy próximo a ella, concretamente en la finca que conocemos como “la Jarilla”, muy cerca del cortijo de este nombre.

En la fotografía se muestra este conjunto pétreo, si nos fijamos detenidamente y dejamos volar la imaginación, veremos la cabeza de este “pensador” sentado, con su cabeza ladeada hacia su hombro izquierdo, cruzados los brazos en su regazo e incluso podemos intuir sus piernas, claro El viajero cree, que es un prodigio de la Naturaleza, por ello deja en estas páginas esta figura, con el objeto de que cada uno saque sus propias propias deducciones y tome su parecer y  opinión.