En esta ocasión el viajero ha caminado por la carretera de los Valles y para entrar en el pueblo, cogido la calleja que los de Salvatierra de los Barros, llamamos de las Monas, por ella llega a la calle González Naharro, mientras baja una pina cuesta, se sitúa en un plano superior, lo que le permite dominar desde ese punto más alto, lo que para él cree que es una hermosa panorámica, además de diversos detalles pintorescos de nuestro pueblo, como son los corrales de las casas que quedan prácticamente situados debajo de sus pies, los tejados de estas casas le quedan al viajero al alcance de la mano.

Es bonita esta estampa, la clásica estampa rural de los pueblos. en lo que algunos lugares hasta ahora. no ha sufrido modificación alguna desde hace muchos años y no han entrado en ellos esos aires de modernidad de cemento y uralita, los corrales quedan delimitados por estas toscas y gruesas paredes. que les ofrecen una precaria seguridad.

En el conjunto, también podemos ver, las sierras de la vecina localidad de La Parra y sobresaliendo de forma tímida, de sobre los tejados de las casas vecinas, la airosa y gallarda torre-campanario de la Iglesia Parroquial del Mártir Señor San Blas del S. XVI.