Entrando en nuestro pueblo Salvatierra de los Barros por la carretera de Burguillos del Cerro, el viajero se encuentra  un poco antes de acceder a la población con este cartel informativo; en él se da a conocer lo más significativo del pueblo que el visitante puede ver como es el Castillo del siglo XII vigía permanente del pueblo y hoy de propiedad particular, el castillo domina desde su atalaya toda la población; la Iglesia Parroquial  del Mártir Señor San Blas de construcción recia y esbelta del siglo XVI; el Pozo de la Nieve declarado de Bien de Interés Cultural  -hoy casi en estado ruinoso debido a las abundantes lluvias caídas, la Asociación cultural “Amigos de Salvatierra”, ha generado un movimiento llamado ¡¡SALVEMOS EL POZO DE LA NIEVE!! para intentar que las Autoridades dependientes del Gobierno de Extremadura se conciencien y evitar que esta joya arquitectónica se venga al suelo-, en eso estamos; el Convento Franciscano de Santa María de Jesús, éstos últimos al igual que la Iglesia procedentes del siglo XVI.

Dentro de la población tenemos una lápida funeraria de la época romana que se halla empotrada en la fachada de una casa de la calle D. Pedro Gómez; otros de los alicientes importantes que el viajero puede encontrar para su visita y contemplación son las numerosas alfarerías principal actividad por la que es conocido este pueblo y que le dieron la fama los arrieros que vendieron los cacharros que los alfareros fabricaban por toda  España desde hace varios siglos, los alfareros hombres afables y sencillos mostrarán a los visitantes sus talleres y la forma cómo ellos trabajan en la rueda o torno, elaboración del barro, etc.

Preciosa la Ermita y la imagen del Santísimo Cristo de las Misericordias, expuesta en su camerino al que tanta fe le profesan los salvaterreños. Otra Ermita intramuros es la de la Inmaculada Concepción, fuera del pueblo pero muy cerca otra ermita muy preciosa la de los Santos Mártires San Sebastián y San Fabián recientemente restaurada y hoy desacralizada.

También podrá visitar el Museo de la Artesanía y el Barro y recorriendo el mismo conocer todos los entresijos de la Alfarería y su historia.

Otro de los alicientes que tenemos en Salvatierra de los Barros es la llamada Fuente de la Romana que conserva más o menos su imagen primigenia y de la que fluye un agua pura procedente de la sierra de la que se surte para el consumo hogareño muchísimos vecinos dada su excelente calidad y frescura.

Por último indicar que para los amantes de la Naturaleza que quieran hacer una Ruta agradable y tranquila se pueden trasladar a la zona verde de Salvatierra que está en la Sierra de los Helechales, donde se encuentra el Castillo y el Convento Franciscano, toda la periferia es un paraíso, preferible la visita en primavera o en otoño, un lugar poblado de árboles autóctonos, grandes helechales, enormes castaños, musgo, setas y hongos y muchísimas plantas olorosas como pueden ser el orégano o el poleo; además podemos observar el paso de aves majestuosas como el águila o el buitre que planean sobre el cielo; en fin, una visita que merece la pena y que al viajero le dejará un agradable sabor después de pasear por el inmenso mar verde que es la dehesa de encinas y alcornoques y bajo ellos la estampa del cerdo ibérico que se alimenta de sus frutos.

Ya de regreso al pueblo en sus bares y restaurantes se puede degustar el mejor vino tinto de pitarra que se hace en toda la periferia, un vino tinto recio y espeso que en ayuntamiento con el jamón ibérico y otros productos del cerdo nos hará sentirnos relajados y felices.

Merece la pena visitar Salvatierra de los Barros.