Esta mañana como acostumbra el viajero, ha salido a pasear al campo y ha captado esta imagen propia de la dehesa.

Tras el paso del temporal del que estábamos alertados por los medios de comunicación, por amenazas de grandes lluvias, viento y olas en toda España, a cuyo temporal le llaman “ciclogénesis explosiva”, aquí en nuestro pueblo, gracias a dios,  sólo nos afectó durante el mediodía y tarde de ayer, que llovió copiosamente, desde luego, falta nos hacía tanto a nosotros como al campo, pero  no causó ningún peligro del que tuviéramos que lamentarnos.

El campo con la lluvia se ha lavado y su tierra, sus plantas y sus árboles desprenden un perfume que cautiva; las encinas se han espabilado, y esta es la estampa que ofrecían esta mañana mostrando sus frutos que aún pequeños y poco desarrollados,  llaman la atención del viajero.

Estas bellotas una vez maduras servirán como alimento de nuestros cerdos ibéricos, no obstante, prematuramente se caen algunas de ellas, se escinden del cascabullo, los ganaderos la llaman bellota melosa, porque tienen una savia azucarada que le encantan a los guarros.

Indicar que por nuestras tierras, aún hace falta mucha agua….

17 de septiembre de 2015