En la Plaza del Atrio, en el lado de la sombra y en los exteriores de la Iglesia Parroquial del Mártir Señor San Blas de nuestro pueblo Salvatierra de los Barros, podemos contemplar  este sencillo y bonito altarcillo de gran sabor pueblerino.

El altar fue instalado en dicho lugar hace ya varios años, una decisión que consideramos muy acertada y que se llevó a cabo con el objeto de preservar de posibles daños o tal vez de rapiña por su valor histórico unas piedras de muchos siglos de vida.

Estas singulares reliquias proceden del Convento Franciscano Santa María de Jesús situado a las traseras del Castillo del que sólo quedan sus venerables ruinas; el convento fue fundado en 1507 por Hernán Gómez de Solís y su esposa Doña Beatriz Manuel de Figueroa, hermana del Conde de Feria y señores de la villa de Salvatierra de los Barros.

En el altarcillo se conserva en piedra de granito el escudo de las armas reales de S. M. El Rey Felipe IV que los monjes mandaron colocar en la fachada del convento como testimonio de su agradecimiento por su generosa participación económica para la restauración y ampliación del mismo; también se encuentra el escudo de la Orden de los franciscanos representando los brazos de Cristo y San Francisco de Asís, que igualmente se hallaba en la fachada del convento, además de otros motivos que se encontraban en la puerta de este edificio monástico y expuesto no sabemos a qué aventuras debido a su total abandono en un lugar tan solitario y distante.

El monasterio de los religiosos franciscanos fue clausurado en 1853 con la retirada de los monjes al ser ordenada su exclaustración.